Las quemaduras por afeitado, el enrojecimiento y los granitos son problemas que pueden aparecer incluso en la piel bien afeitada. Pero no te preocupes, la irritación es (por desgracia) perfectamente normal, especialmente después de tu primer afeitado íntimo.
Estos consejos de cuidado ayudarán a que tu piel se calme rápidamente:
- Aplica una fina capa de bálsamo para después del afeitado en las zonas afeitadas. Esto proporciona a la piel irritada hidratación que calmará y aliviará el enrojecimiento.
- ¿No hay after shave a mano? Un body milk o el aceite de bebé sirven para lo mismo: son suaves, fáciles de extender y cuidan la piel.
- Sin embargo, es mejor evitar los productos de cuidado muy perfumados y con alcohol ya que podrían ser irritar aún más la piel y provocar escozor.
Uy, ¿un pelo enquistado?
El vello enquistado es desagradable, pero suele desaparecer tan rápidamente como aparece. Si estos vellos están en la superficie de la piel, una ligera exfoliación puede ayudar a deshacerse de ellos.
Sin embargo, si el vello encarnado está en las capas profundas de la piel, no intentes sacarlos tú mismo: podrías dañar la piel y agravar la inflamación. Una cita con un dermatólogo es definitivamente tu mejor opción.
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