No obstante, existen una serie de remedios caseros que podrán ayudarte a acabar con ellos y, además, son muy eficaces:
●Aplica una compresa con agua tibia durante 10 a 15 minutos. Házlo al menos entre tres o cuatro veces al día. Este sencillo truco favorecerá la liberación del pus, que aflore a la superficie de la piel y que sane por sí mismo.
●El ácido salicílico de las aspirinas que tomas para mitigar los dolores de cabeza también pueden ayudarte a hacer desaparecer este grano. Solo tienes que triturar una pastilla, formar con ella una pequeña pasta y aplicarla encima de la zona afectada y dejarla actuar durante unos minutos. De esta manera, el ácido salicílico, atenuará la inflamación y el dolor.
●El aceite del árbol del té también puede brindarte una magnífica ayuda. No en vano, goza de propiedades antiinflamatorias y antimicrobianas y, en definitiva, combaten las bacterias que ocasionan estos granos debajo de la piel. Además, reducen la inflamación. Su eficacia está más que contrastada y, por este motivo, se encuentra presente en infinidad de fórmulas cosméticas desarrolladas especialmente para el tratamiento del acné. Te recomendamos que apliques este aceite por la mañana y por la noche con un pequeño bastoncillo empapado.
●La cúrcuma es otro de esos productos que puede sorprenderte por su gran eficacia para resolver este problema. Para ello prepara un poco de polvo de esta especia y forma con ella un ungüento incorporando una parte de agua. Deja que actúe durante una media hora y retira los restos con agua tibia. Si te fijas bien, notarás que el grano ha quedado deshidratado, se ha drenado parte del pus interior y la inflamación se ha reducido de forma ostensible.
●El retinol y los derivados de la vitamina A contribuyen a aumentar la síntesis de colágeno, el ácido hialurónico y la elastina de la piel, pero también resulta excepcional a la hora eliminar esta clase de acné ya que exfolia y elimina las células que se han acumulado en la superficie de la piel obstruyendo el poro.
En cualquier caso, debes abstenerte de presionar estos granitos dado que, además de ser un esfuerzo inútil y sumamente doloroso, contribuyes a que las bacterias se expandan por debajo la piel y produzcan lesiones más graves que dejen cicatrices más profundas.
Sin duda, una manera de mantener bien lejos este tipo de granos es recurriendo a una limpieza y exfoliación regular de la piel. De esta manera, eliminarás las células muertas, mantendrás bien limpios los poros e impedirás que se acumulen en ellos la suciedad. ¿Qué te parece hacerlo con Urban Skin Gel Detox con Arcilla o con NIVEA Exfoliante de Arroz Suave? Dispuestos a echarte una mano a un click de distancia.
Fuentes consultadas: