grupo de personas, sonriendo

¿Cómo exfoliar la piel? La guía NIVEA definitiva

Todo lo que necesitas saber sobre la exfoliación para que la piel de tu cara y tu cuerpo esté suave y radiante.

¿Cómo exfoliar la piel? La guía NIVEA definitiva

La piel es el órgano más grande del cuerpo, por lo que saber cómo cuidarla adecuadamente es fundamental. Ya hemos cogido la costumbre de limpiarla e hidratarla con regularidad, pero, ¿y la exfoliación? Este es otro paso necesario en nuestra rutina de cuidado de la piel que nos ayuda a mantenerla suave y uniforme, aunque tiene muchos más beneficios.
 
Si te quieres exfoliar la piel y quieres aprender todo lo necesario para empezar, estás en el lugar adecuado. Sigue leyendo para saber qué es un exfoliante, cómo usarlo, cuál es el mejor para tu tipo de piel y mucho más. 

¿Qué es la exfoliación?

La palabra "exfoliación" proviene del latín exfoliare, que significa deshojar. Exfoliar el cuerpo es, básicamente, quitar capas de la piel. Aproximadamente cada 30 días mudamos de forma natural la piel muerta para dejar paso a las nuevas células que van a formarse en la capa superior de nuestra piel.

¿Por qué es bueno exfoliarse?

A veces, cuando las células muertas no mudan, nuestra piel tiene un aspecto apagado, seco o quebradizo, y se obstruyen los poros. La exfoliación puede ayudar a prevenir este efecto, ya que acelera el proceso al desprender las células muertas de la superficie de nuestra piel, al mismo tiempo que elimina suciedad y bacterias. Esto hace que nuestra piel esté más suave, uniforme y radiante. 

 

Una exfoliación regular tiene muchos beneficios para ti:

· Elimina células de piel muerta.
· Estimula el flujo sanguíneo y elimina toxinas. 
· Aporta brillo y mejora el aspecto de la piel.
· Potencia la renovación de la piel, haciéndola así más luminosa. 
· Prepara la piel para absorber mejor los hidratantes y sérums con los que la nutres. 
· Previene la aparición de poros obstruidos que pueden causar brotes de acné. 
· A largo plazo, aumenta la producción de colágeno y la elasticidad de la piel.

Tipos de exfoliación

Existen muchas formas de exfoliar la piel. Los métodos más comunes para hacerlo en casa son el uso de cremas, mascarillas y otros productos exfoliantes, aunque también existen herramientas para exfoliar, tales como la piedra pómez, los guantes exfoliantes, las esponjas de ducha, los cepillos exfoliantes o los limpiadores eléctricos.  
 
En función de las necesidades de tu piel, también puedes recurrir a métodos profesionales, como los peelings químicos, la microdermoabrasión o el dermaplaning. Para estos casos, lo mejor es consultar a un dermatólogo que pueda ayudarte a escoger la mejor opción.
 
Puedes y debes exfoliar todas las partes de tu piel, pero las zonas más delicadas, como la cara, necesitan un cuidado especial.
mujer de cabello rizado exfoliando su piel

¿Cómo exfoliar la piel de la cara?

Incluir la exfoliación en tu rutina de cuidado de la piel es muy fácil y puede ayudarte a conseguir una piel más sana y brillante. Dado que la cara es una de las zonas más sensibles del cuerpo, es importante que uses un producto exfoliante muy suave y observes cómo reacciona tu piel. 
 
Un buen producto para empezar es el Exfoliante Facial de Arroz Suave NIVEA, diseñado para ofrecer una limpieza profunda para todo tipo de pieles. Exfolia intensamente y elimina de forma efectiva las células muertas, además de refinar y suavizar la superficie de la piel para darle un aspecto uniforme. 

¿Cómo aplicar un exfoliante facial?

Lo más importante a la hora de usar exfoliantes faciales es hacerlo suavemente para no dañar tu piel. Aquí tienes algunos pasos que pueden guiarte: 
 

- Utiliza tus dedos para extenderlo sobre la nariz, la frente y la barbilla. 
- Masajea desde el centro de la frente hacia las sienes.
- Restriega suavemente desde el puente hasta la punta de la nariz.
- Haz movimientos circulares más intensos en las fosas nasales y mucho más suaves sobre las mejillas.
- Aplícalo a lo largo de la línea de la mandíbula hasta la barbilla. 
- Finalmente, baja desde la barbilla hacia el cuello. 
- Trata siempre de evitar las zonas de los ojos y la boca.


La exfoliación según tu tipo de piel

Tu tipo de piel determinará cómo debes exfoliarla para darle justamente lo que necesita. 
 

Piel normal

Si tu piel no es propensa al acné, a la sequedad, al exceso de sebo o a la irritación, todo indica que es normal. La mayoría de productos y métodos exfoliantes te irán bien, por lo que es recomendable que pruebes algunos diferentes para encontrar el que más que gusta y al que mejor reacciona tu piel.
 

Piel seca

Si notas tu piel seca, agrietada o tirante, tienes la piel seca, por lo que es muy importante que elimines las células muertas para permitir la regeneración. Busca exfoliantes hidratantes que puedan penetrar en la superficie de tu piel para que tus cremas y sérums hagan más efecto y nutran mejor las células nuevas.
 

Piel grasa

Tienes la piel grasa si observas brillos en ella y la sientes grasa. Esto significa que puedes usar productos exfoliantes un poco más fuertes que te ayudarán a eliminar el exceso de sebo en la piel y utilizar un cepillo exfoliante puede ser una gran idea.
 

Piel sensible

Si el uso de productos nuevos irrita tu piel, quizá sea sensible, así que debes cuidarla mucho. Escoge productos para pieles sensibles y evita aquellos exfoliantes que te irriten. También puedes probar a aplicar tu exfoliante con un paño suave. 
 
A veces, la piel sensible es un síntoma de alguna condición médica subyacente como la rosácea o el eccema. Recuerda pedir asesoramiento médico a un dermatólogo antes de usar productos nuevos.

Piel mixta

La mezcla de zonas grasas y secas en la piel suelen delatar a las pieles mixtas. Si es tu caso, prueba a alternar entre un exfoliante y un cepillo, concentrando el producto en las zonas más secas, pero sin utilizar ambos métodos a la vez.
 

¿Cómo exfoliar la piel del cuerpo?

La exfoliación no es solo para la cara. Tenemos células de piel muerta por todo el cuerpo que deben ser eliminadas. Exfoliar el cuerpo no solo suaviza la piel, sino que también puede ayudar con otros problemas como el acné corporal o la celulitis. 
 
Aquí tienes algunos consejos para aprender a exfoliar cada parte de tu cuerpo:

1 Brazos y piernas

Lo más fácil para eliminar la capa de piel muerta en estas zonas es usar cepillos, guantes o esponjas. Frota el área suavemente durante unos 30 segundos en la ducha para deshacerte de las células muertas y estimular la circulación. También puedes probar el cepillado en seco, para lo cual necesitas un cepillo corporal con el que harás movimientos circulares por todos tus brazos y piernas. Además de cepillar la piel muerta, es bueno para prevenir la celulitis y favorece el drenaje linfático.

 

2. Pies y manos

Existen muchísimos productos exfoliantes y peelings diseñados específicamente para exfoliar pies y manos. La piedra pómez es un exfoliante natural perfecto para las áreas de piel más gruesa, como las rodillas, los codos o los pies. Es recomendable remojar los pies en agua tibia previamente para ablandar la piel y mojar la piedra pómez antes de usarla.

 

3. Zona púbica

Antes de afeitar o depilar la línea del bikini o el pubis, es recomendable exfoliar la piel. Esto la suavizará y ayudará a prevenir cualquier problema que la eliminación del vello pueda causar, como la irritación provocada por la cuchilla, los pelos enquistados o el picor. Debes usar un exfoliante muy suave, una esponja de luffa o un cepillo corporal y darte una ducha templada antes para preparar la piel.

¿Con qué frecuencia debo exfoliar la piel?

Lo más importante es no hacerlo en exceso, especialmente si este mundo es nuevo para ti. Cada vez que te exfolias comienza un proceso de regeneración que puede estresar la piel. Ten mucho cuidado y aprende a interpretar lo que tu piel te pide. 
 
Por lo general, exfoliar la cara un par de veces a la semana es más que suficiente para quitarle ese aspecto apagado sin eliminar en exceso la hidratación natural de tu piel, aunque es posible que las pieles grasas necesiten una exfoliación más frecuente. Debes tener en cuenta que exfoliar en exceso las zonas sensibles del cuerpo, como la cara, puede ser contraproducente y causar sequedad, enrojecimiento e irritación.
 
También debes tener en cuenta la edad. La piel de las personas jóvenes suele regenerarse en unos 28 días, pero el proceso se vuelve más lento con la edad y puede llegar a tardar 45 días en pieles más maduras. A medida que envejecemos, sigue siendo recomendable exfoliar la piel, pero puedes hacerlo una vez por semana en lugar de dos.

mujer sonriendo

¿Cuál es el mejor momento para la exfoliación?

Sí, hay momentos mejores que otros para exfoliarse, ¡descúbrelos!
 

Mejor por la noche

Cada vez que te exfolias expones una capa de piel nueva, lo que hace tu piel más sensible y vulnerable. Exfoliarla por la noche es lo más recomendable, ya que evitas exponer tu piel al daño solar y a los radicales libres y permites que se recomponga durante el sueño. Después de exfoliar tu piel, será más sensible de lo normal a los dañinos rayos UV, así que es especialmente importante que apliques un protector solar.  

 

· Nunca después de un tratamiento

Espera aproximadamente una semana después de un tratamiento facial para exfoliarte, ya que hacerlo antes puede ser dañino para tu piel. Es recomendable la exfoliación previa a la depilación o el afeitado, pero es mejor que esperes unos días para volver a hacerla después. 

 

Algunos consejos finales

Ya conoces los beneficios de exfoliar la piel adecuadamente y cómo esto puede ayudarte a darle un aspecto más suave y radiante. Ya has aprendido lo fundamental para empezar a eliminar las células de piel muerta y el exceso de grasa y purificar tu piel. Con estos consejos finales, lo tendrás todo para empezar a cuidarte mejor.
 
mujer exfoliando
Qué SÍ hacer
 Utiliza el exfoliante adecuado para tu tipo de piel.
Exfóliate por la noche 
Aplica protector solar después de la exfoliación
Aplica un hidratante después de la exfoliación 
Exfolia tu cuerpo además de tu cara
 

Qué NO hacer
No exfolies tu piel en exceso
No exfolies la piel después de un tratamiento
No exfolies tu piel si sientes irritación
No te exfolies si tienes cortes, heridas abiertas o quemaduras solares en la piel
No te hagas una exfoliación fuerte