Cómo lidiar con la piel muerta: causas y rutinas para deshacerte de ella

La piel muerta es una parte natural del proceso de renovación de nuestro cuerpo. Las células muertas suelen aparecer como manchas ásperas, secas o escamosas en la capa más externa de la piel. En los casos más graves, la acumulación puede causar callosidades, especialmente en las plantas de los pies; pero usando diferentes técnicas de exfoliación puedes eliminar esta piel fácilmente. ¡Incluso la piel muerta después de bañarse!

Tras la exfoliación, las células muertas de la piel muestran un tono grisáceo y un aspecto escamoso.

En este artículo encontrarás todo lo que necesitas saber sobre la piel muerta en el cuerpo, rutinas para prevenirla o consejos y remedios para eliminarla.

Hay un ciclo de 28 a 42 días en el que las células de la piel pasan de la capa media (dermis) a la capa externa (epidermis), y se desprenden de forma natural, dejando al descubierto otras nuevas. Este ciclo permite restaurar la piel y sustituir el tejido dañado. Sin embargo, a veces estas células muertas no se desprenden de la forma esperada y pueden acumularse, generando problemas cutáneos.

10 razones por las que la piel muerta no se desprende correctamente:

1. Edad
   Según envejecemos, la renovación celular de la piel va más despacio, provocando una descamación más lenta y produciendo menos grasa. Es decir, causando sequedad.
   
   
2. Limpieza inadecuada
   Una limpieza irregular puede prolongar la presencia de células muertas, dejando restos de aceites y cosméticos en la piel.
   
   
3. Exfoliación incorrecta
   La exfoliación solo debe hacerse una o dos veces por semana, no diariamente.
   
   
4. Mal uso de la crema hidratante
   Utilizar una crema hidratante inadecuada no ayuda a deshacerse de las células muertas debidamente.
   
   
5. Tiempo y clima
   Los ambientes secos y la calefacción interior pueden resecar la piel, favoreciendo la acumulación de células muertas.
   
   
6. Exposición al sol
   Tomar el sol sin protección puede provocar sequedad, manchas y aumentar (engrosar) la capa superior de la piel.
   
   
7. Duchas y baños con agua caliente
   Seguro que te has encontrado con esta situación alguna vez: piel muerta después de bañarse, pero no te preocupes, es algo normal. Esto puede dañar la barrera de hidratación natural de la piel, y como resultado, tu piel se vuelve menos eficaz para combatir la sequedad y crea una acumulación de células muertas.
   
   
8. Jabones agresivos
   Pueden eliminar los aceites de la piel, causando sequedad, especialmente en la piel de la cara, que es más sensible
   
   
9. Piscinas
   El cloro de las piscinas puede irritar y resecar la piel, provocando la aparición de células muertas.
   
   
10. Afecciones cutáneas
    Algunas afecciones de la piel, como la psoriasis o los eczemas, son propensas a causar pieles muertas. (Si crees que puedes tener alguna de ellas debes consultar a un médico)

Dependiendo de la parte del cuerpo y el tipo de piel tendrás que seguir ciertas rutinas o productos que se ajusten a tus necesidades.

2. Exfoliación

Existen 2 formas de exfoliar la piel para eliminar las células muertas:

Exfoliación química: el método de más suave que “disuelve” la piel muerta.

El Derma Skin Clear Peeling Exfoliante de Noche está enriquecido con Ácidos Salicílico y Glicólico para estimular la eliminación y renovación de las células viejas y dañadas de la piel. El producto está diseñado para pieles propensas a las imperfecciones y no se recomienda para pieles sensibles.

Exfoliación mecánica: a diferencia de la exfoliación química, esta exfoliación elimina físicamente la piel muerta. Esta técnica puede hacerse con un cepillo suave o una toallita para frotar suavemente en círculos sobre el rostro. Esta técnica, más eficaz en pieles normales-grasas, suele ser más dura que la química. En pieles secas o sensibles, se recomienda evitar esta exfoliación.

NIVEA ofrece una gama de exfoliantes con productos como exfoliantes faciales suaves de arroz, con arroz orgánico y arándanos, para eliminar las impurezas diarias y limpiar la piel en profundidad.

4. Hidratación (crema de día/noche)

Este es un paso importante en tu rutina de cuidado de la piel para evitar la sequedad, y con ello la piel muerta.

NIVEA ofrece cremas de día y cremas de noche para incluir en tus rutinas de cuidado de la piel, con productos para todos los tipos de piel. Ambas gamas están diseñadas para garantizar que todos los tipos de piel se tratan con cremas muy bien formuladas.

5. FPS (por la mañana)

Es muy importante que uses protección solar. Los Rayos UV pueden ser muy perjudiciales para tu piel, dañando las células de la superficie de la piel y aumentando la producción de piel muerta.  

Utilizar un exfoliante corporal natural para exfoliar la piel con un cepillo, una esponja o un guante es el método más eficaz para deshacerse de las células muertas de la superficie del cuerpo. Exfoliar a fondo la piel elimina las células muertas y favorece la circulación sanguínea.

1. Exfoliante de café
   Los posos de café son un exfoliante eficaz para eliminar las células muertas de la piel. Además, el café tiene muchos flavonoles que mejoran la textura de la piel y mantienen el brillo cuando se aplica directamente sobre la piel.
   
   
2. Exfoliante de avena
   Todos los tipos de piel se benefician de la textura arenosa y granulosa de la Avena para eliminar la piel muerta.
   
   
3. Polvo de cáscara de naranja
   Guarda cáscaras de naranja y déjalas secar al sol durante unos días antes de utilizarlas. Después, pon las cáscaras de naranja deshidratadas en una licuadora para pulverizarlas y, a continuación, consérvelas en una bolsa hermética. El exfoliante de cáscara de naranja puede ayudar a rejuvenecer el cutis eliminando las impurezas además de las células muertas de la piel.
   
   
4. Harina de garbanzos
   Otro producto fácil de encontrar en el armario de la cocina es la harina de garbanzos, que ayuda a exfoliar la piel, dejándola suave y radiante.
   
   
5. Cepillado en seco
   Usando un cepillo seco se pueden eliminar las células muertas de la piel y conseguir que vuelva a tener su brillo natural de nuevo.