Cómo tener la piel luminosa y radiante

Cómo tener la piel luminosa y radiante

Todas aspiramos a tener una piel luminosa y radiante. Una pretensión que no debería resultar difícil de conseguir si nos esmeramos en nuestra rutina de limpieza y cuidado facial y, por supuesto, recurrimos a los productos adecuados. Aunque no hay que perder de vista otros aspectos relacionados con nuestro estilo de vida como la alimentación, porque –una vez más– se cumple la máxima de que somos lo que comemos ya que nuestra piel es un fiel reflejo de nuestra dieta.

Alimentos para tener una piel radiante

Una piel apagada y sin brillo es en muchas ocasiones la respuesta más inmediata de nuestro organismo a una mala dieta o a unos hábitos de vida no adecuados. Lo cierto es que aquellas personas que abusan de los alimentos procesados, los dulces y que apenas ingieren alimentos frescos son las más propensas a mostrar un cutis apagado.

En definitiva, ¿qué comemos? Pues con independencia de tu tipo de piel, procura que en tu lista de la compra no falta nada de lo que sigue, aunque hay muchos más que pueden ayudarte a conseguir una piel radiante:

  • Frutas con gran abundancia de vitamina C. Esta última es imprescindible para la formación del colágeno que –recordamos– es la proteína que sostiene la piel y contribuye a su firmeza.
  • Tomates pues son muy ricos en licopeno ya que favorece la hidratación. Si no te gustan mucho los tomates, no hay problema porque puedes reemplazarlos por sandías, albaricoques o papayas, entre otros muchos.
  • Superalimentos como el aguacate, la miel, o los tés, con un gran potencial nutritivo.
  • El cacao es un potente antioxidante que, además, activa la microcirculación.

Pero no olvides que hay muchos más alimentos que pueden jugar un papel fundamental en el buen estado de tu piel.

La importancia de un sueño reparador para la piel

Tampoco podemos pasar por alto que la falta de sueño puede pasarnos factura. Por lo tanto, un correcto descanso nocturno es esencial para que nuestra tez no pierda ni un ápice de luminosidad.

En este sentido, ciertos estudios sostienen que un sueño deficitario o de baja calidad provoca el envejecimiento prematuro de la piel y que esta reaccione peor frente a las agresiones externas.

Productos para cada tipo de piel

Una vez que te has asegurado de que tus hábitos son los adecuados para conseguir tu objetivo de una piel bonita (aunque también te ayudarán a ganar en tu salud general), recuerda que emplear un producto específico para cada tipo de piel también es esencial.

En NIVEA contamos con muchas líneas de cuidado enfocadas a las necesidades concretas de cada cutis. Una de nuestras líneas estrella es la que incluye la poderosa coenzima Q10, con su doble función energizante y antioxidante. Además, con diferentes versiones: para piel normal, seca, mixta y cansada.

Así que ya sabes que la dieta, el descanso nocturno, la limpieza de la piel y una crema hidratante de calidad son los cuatro pilares sobre los que se sostiene un piel radiante. ¡Que no te falte ninguno de ellos!